- Medellín debe apostar por tener una E.P.S. pública o incluso mixta.
Solicitar a Comfenalco E.P.S. que regrese a prestar el aseguramiento del Régimen Subsidiado en Medellín. - Exigir a Caprecom un servicio mejor y oportuno a los pacientes afiliados y un pronto pago a la red prestadora de servicios.
- Caprecom debe suspender la estrategia que viene implementando en favor de la integración vertical.
- Las utilidades de aseguradores y prestadores no pueden ser a costa de malos salarios del recurso humano de la salud, ni de la buena calidad en el servicio.
- Se debe revisar la intermediación del Régimen Subsidiado en las grandes ciudades, éstas podrían responder por los pacientes del Sisbén 1, 2 y 3, contratando directamente con la red pública y privada, sin necesidad de intermediación.
- La integración vertical se ha convertido en una amenaza para los hospitales públicos y privados. Metrosalud, por ejemplo lleva dos años generando pérdidas.
- El P.O.S. debe actualizarse incluyendo nuevos medicamentos, procedimientos y ayudas diagnósticas, para garantizar el derecho a la salud a todos los colombianos.
- Las enfermedades de alto costo, y la alta concentración de pacientes con estas enfermedades en Medellín, hacen inviables a las E.P.S. contributivas y subsidiadas. La salud no puede tomarse como un negocio, pero el sistema sí debe garantizar equilibrio financiero.
- La Unidad de Capitación o el valor que el Estado reconoce al asegurador por cada persona debe aumentarse en lo contributivo y en lo subsidiado, para poder ampliar los beneficios del P.O.S. y así disminuir el recobro por lo no P.O.S.
- Los costos de los medicamentos deben regularse desde la producción, importación y comercialización, para garantizar tratamientos efectivos por un menor valor.
- Debe exigirse y controlarse la calidad de los medicamentos genéricos.
Los costos de los insumos deben ser regulados. - Las barreras de acceso deben superarse para garantizar el derecho a la salud con calidad de todos los colombianos.
- La corrupción tiene que ser combatida y evitada en toda la cadena aseguradora y prestadora de servicios de salud.
- Los incrementos anuales de la U.P.C. deben obedecer a la inflación de la canasta de salud.
- El sistema exige un flujo oportuno de recursos a toda la red prestadora y esto no está ocurriendo.
- En el 2009, nueve de quince E.P.S. del sector contributivo y seis de nueve E.P.S. del sector subsidiado, presentaron margen operacional negativo. Dos de nueve prepagadas generaron pérdida, lo que pone en grave riesgo a todo el sistema de salud de Colombia.
- El Gobierno, el Congreso, los usuarios y los actores del sector de la salud deben abrir un debate Nacional con fecha de cierre, que resuelva la crisis del sistema de salud en el País, que discuta sí se cambia o no el modelo actual.
- El cambio de modelo o las modificaciones que se le hagan al actual, tiene que garantizarle el derecho a la salud con calidad a los 44 millones de colombianos y debe ser sostenible financieramente.
- El Gobierno, los empresarios y los industriales, deben apostar por un modelo económico que garantice un incremento importante en el empleo y que formalice la mayoría de los empleos informales; garantizando más colombianos afiliados al Régimen Contributivo y la disminución en la demanda del Subsidiado.
- Hay mucho más por hacer, usted puede aportar a la construcción de un sistema de salud garantista en los derechos y sostenible financieramente.